Todos hemos pasado alguna vez por una situación en la que hemos tenido que hablar en público, y, aunque tener nervios, en estos casos suele ser normal, se puede aprender a hablar en público para convencer y persuadir. En este post, te contamos cómo.

 

 Hablar en publico 

 

Hablar bien en público puede cambiar la forma en la que otras personas te ven y te permite atraer su atención.

 

Una buena retórica puede ayudar a vender más, captar más clientes y hacer más visible una empresa. Todos recordamos a grandes oradores como Martin Luther King con su I have a dream… o Barak Obama con su Yes we can…

 

Ventajas de hablar bien en público

Para los grandes oradores que hemos citado no fue complicado atraer a multitud de personas con sus palabras, en el ámbito empresarial hablar bien en público aporta ventajas como:

 

  • Aumento de la autoestima. Desarrollar una habilidad nueva hace aumentar la confianza en uno mismo y esa confianza se transmite a los demás cuando hablas.
  • Captación de clientes. Tus palabras pueden ser la clave que convenza a tus clientes para adquirir un producto o servicio.
  • Éxito en los negocios. Cuando creamos una nueva empresa debemos desarrollar muchas habilidades como la comunicación, la gestión de equipos o de recursos. La habilidad de hablar bien en público te ayudará a comunicarte mejor y a asumir el liderazgo de la empresa.
  • Poder de influir en otras personas. Todos recordamos el famoso discurso que dio Steve Jobs en la Universidad de Stanford en el año 2005 y el gran impacto que tuvo para la motivación de los recién graduados.
  • Serás percibido como un experto en una materia. Exponer un tema específico ante un público de forma ordenada y con datos, hará que aparezcas como una persona con experiencia y conocimiento profundo del tema.

 

Con la habilidad de hablar en público ocurre lo mismo que con otras habilidades, hay personas que la tienen innata, pero quienes no la tienen la pueden aprender y mejorar.

 

Técnicas para hablar en público y a atraer a tu audiencia

Imagina que tienes que presentar tu proyecto emprendedor ante varios inversores y que el futuro de tu empresa depende de tu habilidad para hablar en público y ser persuasivo. ¿Cómo te sentirías? Es probable que bastante nervioso.

 

Para evitar los nervios, te proponemos varias técnicas para hablar en público y atraer a tu audiencia:

 

  • Copia a los mejores. Busca a oradores destacados, escucha sus charlas y fíjate en cómo hablan, qué dicen y de qué manera se mueven.
  • Antes de nada, prepárate. Encontrarse ante varios potenciales inversores y no saber explicar bien qué hace tu empresa, qué beneficios puede obtener y cómo, no dará muy buena impresión. Sin embargo, la búsqueda de datos, el análisis y la organización de la información te ayudará a que todo sea más fácil de recordar, a tener más seguridad en lo que dices y al expresar mejor tus ideas.
  • Conoce a tu audiencia. No es lo mismo hablar ante los compañeros de tu empresa que antes desconocidos que son potenciales clientes o inversores. Conoce a tu audiencia, aprende qué es lo que necesitan o qué problemas tienen.
  • Practica, practica y practica. Es un mantra que no puedes olvidar. Lo de practicar ante el espejo es antiguo pero sigue funcionando. Escucha lo que dices, observa tus movimientos con las manos, el rostro y el cuerpo. Aprende a dar énfasis a tus palabras con tu forma de moverte. Si puedes practicar delante de amigos o familiares, probablemente te ayudará.
  • Aprende a modular la voz. El impacto del mensaje que quieras transmitir cuando hables en público va a depender, en gran medida, de cómo modules tu voz. Una voz monótona, aburre al público, pero si aprendes a manejar los silencios y a dar énfasis a los datos importantes mantendrás la atención durante todo tu discurso.
  • Cambia lo que te dices a ti mismo. Evita frases como: “Estoy muy nervioso”, “Va a salir fatal”, “Voy a meter la pata en algo”. Cambia esas frases por otras más positivas: “Puedo hacerlo”, “Soy buen orador”, “Confío en mí mismo”.
  • Evita el lenguaje confuso. Los mejores oradores utilizan siempre palabras sencillas porque conectan mejor con las personas, ya que son fáciles de entender y recordar, por lo que evita terminología excesivamente técnica, frases demasiado largas o términos poco frecuentes.
  • Utiliza el humor. Siempre considerando quién es tu audiencia y sin excesos, el humor es una buena forma de conectar con otras personas.
  • Anticípate a los imprevistos. Una de las cosas que más nos inquietan cuando hablamos en público es que pase algo que no hayamos previsto. La clave es pensar antes en todos los imprevistos que puedan surgir y tener preparadas alternativas o soluciones: la proyección de la presentación no funciona, una persona hace una pregunta que no sabemos responder etc.

 

Errores que debes evitar al hablar en público y soluciones

Todos podemos cometer errores a la hora de hablar en público, lo importante es aprender  de los errores y descubrir cómo evitarlos.

 

Los errores más comunes que se suelen cometer son los siguientes:

 

  • No fijes demasiado tu atención en el PowerPoint que utilizas como presentación, porque dejarás de tener contacto visual con el público. La presentación debe ser solo un apoyo, pero tu exposición debe ser natural y no parecer que estás leyendo.
  • En ocasiones, algunos oradores, piensan que la preparación hace que se reduzca la espontaneidad y no es cierto, porque la preparación, como decíamos antes, nos aporta seguridad.
  • No te empieces a preparar el día anterior, tómate el tiempo necesario, analiza, práctica, modifica, el resultado mejorará.
  • La parte más importante de hablar en público no es tu producto o servicio sino la eficacia de la comunicación que utilices para venderlo.
  • No centrarte en lo que puedes aportar a quien te escucha y hacerlo en ti. Casi todas las presentaciones comienzan hablando de nosotros mismos y deberían centrarse en lo que le quieres contar a tu audiencia y el valor que aporta.

 

Hablar bien en público, por lo tanto, es una habilidad muy importante, tanto para los negocios, como para la vida personal, que puede mejorarse para captar clientes y convencer a inversores y socios.

 

 

Alejandro Betancourt